Yo jamás me había enamorado, y menos de aquella manera tan desmedida.
Pero sabía que cuando me enamorara, me enamoraría como lo hice.
Enamorándome de sus lunares, de cada una de sus cicatrices, de sus pecas y de cada una de las cosas que le hacen imperfectamente perfecto.
Eso es amor.
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